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Los cristales para ventana cumplen un papel importante: permitir la iluminación natural de la habitación. Pero esto es posible solo si se elige el correcto, ya que, como imaginarás, cada tipo de vidrio es diferente y eso influye en su funcionamiento.
Si estás construyendo habitaciones en tu hogar, oficina u otros espacios, o si los estás remodelando, te conviene conocer las clases de cristales para ventanas que hay, y lo que puedes tomar en cuenta al elegir el adecuado para tu proyecto.
Clases de cristales para ventanas: qué tener en cuenta para elegir el correcto
La clave para elegir un cristal adecuado para una ventana es saber para qué se usará, es decir, a qué se enfrentará el vidrio una vez instalado. Partiendo desde ahí, puedes escoger entre…:
Vidrio templado
Este es uno de los vidrios para ventanas de casa más conocido y el más conveniente.
Esto se debe a que su principal característica es su resistencia a los golpes (4 veces mayor a la del vidrio normal) y a los cambios térmicos bruscos. Además, se fragmenta en diminutos trozos cuando se quiebra, con lo que resulta menos peligroso.
Esta alta resistencia hay que buscarla en su proceso de fabricación, durante el cual el material se calienta y luego se enfría rápidamente con aire para dar al cristal la estructura molecular que le da sus características.
Cristal flotado
El vidrio flotado es utilizado ampliamente entre los cristales para ventanas por sus cualidades aislantes y acústicas, particularmente cuando se usan en doble acristalamiento. Se le llama flotado por su proceso de fabricación en que se hace flotar el vidrio recién fundido sobre una piscina de estaño.
Su color semi oscuro natural ofrece cierto grado de privacidad una vez instalado, lo cual ayuda a ahorrar si vas a instalarle una película de papel ahumado para mayor protección.
Vidrio laminado
También conocido como vidrio de seguridad, el cristal laminado está compuesto de varias láminas de vidrio y PVB (polivinilo butiral) o EVA (etil-vinil acetato). Lo que se hace es intercalar dos tapas de cristal con una lámina de EVA o PVB, y si se quiere aumentar sus propiedades se agregan más capas de ambos materiales.
El vidrio laminado está entre los tipos de cristales para ventanas y puertas más usados en el mercado. Gracias a la película intercalada que une los cristales, si estos se rompen, las astillas no saltan porque están adheridas a ella, haciéndolo muy seguro para el uso domestico.
Cristales bajo emisivos
Este tipo de cristal para ventana se le llama bajo emisivo porque está bañado en varios materiales con plata como principal componente.
La intención es que los rayos del sol tengan menor incidencia en la habitación. Por lo general, se les coloca con el sistema de doble acristalamiento, es decir, dos vidrios separados por una cámara de aire sellada herméticamente.
Además, con esta disposición de doble cristal se consigue un buen aislamiento acústico, razón por la que se le usa en hogares cerca de mucho tránsito y en oficinas.
Con estos cuatro tipos de cristales para ventanas tienes lo necesario para elegir un buen vidrio para tu proyecto, sea cual sea la clase de ventana.
Recuerda que siempre es conveniente consultar con un experto para que recibas recomendaciones más puntuales. Así tus espacios estarán 100% acondicionados.
