Cambiar la bañera por un plato de ducha

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Cuarto de baño con ducha

Durante muchos años los cuartos de baño de las casas no se concebían sin una gran bañera en su interior. Hoy esto ha cambiado y cada vez son más los que se animan a cambiar bañera por plato de ducha. Los motivos principales: la comodidad y la seguridad.

Razones para cambiar bañera por plato de ducha

Es innegable que la bañera tradicional cuenta con una serie de inconvenientes como los que detallamos a continuación:

  • El acceso a una bañera puede ser difícil e incluso peligroso para personas de edad avanzada o con problemas de movilidad.
  • Ocupa mucho espacio en el cuarto de baño.
  • Hace falta mucha agua para su utilización.
  • Necesita un calentador de agua con la capacidad adecuada para poder llenarla con agua caliente.
  • Requiere más tiempo para llenarse, lo que es una desventaja cuando tenemos prisa.

El plato de ducha gana por goleada a la bañera en todos y cada uno de estos puntos: es más seguro, más pequeño y su uso es más rápido. Además, con él conseguimos un mayor ahorro energético.

Por otro lado, aún son muchos los que prefieren la bañera por su valor estético o porque les resuta más cómoda para ciertos usos como por ejemplo bañar a los niños pequeños. Bañera versus ducha: cada solución cuenta con sus propios partidarios.

¿Bañera o ducha?

Con todo, la prueba definitiva de que en lso últimos tiempos la ducha le gana la partida a la bañera es que en la mayoría de las casas donde existen ambas, la ducha se usa con mucha más frecuencia.

Obras necesarias y tipos de reforma

Transformar un baño y cambiar bañera por plato de ducha requiere llevar a cabo una obra de cierto calado dentro de casa. Dado que se trata de una habitación fundamental para cualquier hogar, es conveniente evitar soluciones chapuceras y hacer las cosas bien. Es decir, dejar el trabajo en manos de profesionales.

Según el presupuesto del que vayamos a disponer para ejecutar esta transformación, tenemos a nuestra disposición diferentes opciones:

Instalar un kit de plato de ducha

La opción low cost. Al sacar la bañera se suele disponer de bastante espacio para instalar un completo kit de ducha prefabricado sin tener que llevar a cabo grandes modificaciones. Es decir, no es necesario meterse en grandes gastos de fontanería.

Realizar el cambio de bañera a plato de ducha por uno mismo requiere de cierta habilidad y conocimientos de fontanería

En el mercado hay muchos tipos de kits de cabina de ducha de distintos precios, entre 200 € y 2.000 €, según el tamaño y la calidad de los materiales. Por lo general, están hechos con materiales acrílicos prefabricados, con suelo antideslizante y una puerta de vidrio o plástico. Opcionalmente se puede embellecer el kit de ducha con nuevos azulejos de baño, lo cual lógicamente encarece el precio.

Consejo: aunque los modelos prefabricados que se venden en las grandes superficies son relativamente sencillos de instalar, a la hora cambiar bañera por plato de ducha siempre es aconsejable acudir a los servicios de un profesional, sobre todo en lo que afecta a los trabajos de fontanería. Esto nos puede ahorrar muchos disgustos y mucho dinero.

Reformar el baño por completo

Una vez que hemos decidido cambiar bañera por plato de ducha tal vez valga la pena aprovechar para reformar el baño completamente y rediseñarlo a nuestro gusto. Esta es obviamente una opción más cara y un trabajo más complejo que debemos dejar en manos de una buena empresa especializada en este tipo de reformas.

Eso sí, si nos decantamos por esta opción tendremos la oportunidad de crear un espacio único, funcional y bonito, con muchas posibiidades en cuanto a uso y diseño. Por ejemplo, podremos optar por un plato de ducha sin bordillo, para lo cual habrá que crear una pendiente de drenaje alrededor del desagüe.

Plato de ducha rectangular con bordillo y puerta de cristal. El perfecto sustituto de la bañera

Consejos para cambiar bañera por plato de ducha

Antes de lanzarnos a realizar este radical cambio en nuestro cuarto de baño, será necesario analizar detenidamente el diseño elegido y su conveniencia en base a nuestras necesidades y nuestro presupuesto.

Por ejemplo, para que éste no se nos vaya a las nubes, hay que saber que siempre será mejor ubicar la ducha en el lugar donde anteriormente se hallaba la bañera.

Además de esto, los expertos instaladores de platos de ducha aconsejan prestar atención a algunos aspectos importantes en cuanto a su ubicación, tamaño e instalación:

  • Las dimensiones mínimas del plato de ducha deberían ser de 90 x 90 cm. Menos de eso no resultaría cómodo para la persona que lo va a utilizar.
  • Por el mismo motivo, hay que procurar que la distancia entre el inodoro y la ducha sea de al menos 40-45 cm.
  • Es importante que no haya ventanas en las paredes del plato de ducha. De lo contrario, hay muchas probabilidades de que aparezcan el molesto moho y los malos olores.
  • Para poder entrar y salir cómodamente de la ducha, la puerta no debe chocar con los otros muebles y elementos del baño. Una puerta corredera o unas cortinas de ducha pueden ser una buena opción.
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